Energía termosolar y conocimiento exportable


Vengo defendiendo que la razón para apoyar el desarrollo de las energías renovables no puede ser económico, sino medioambiental y que, aún así, el país que haga bien las cosas, obtendrá beneficios de otra índole, en particular, económicos y estratégicos en relación con sus garantías de abastecimiento energético.

El conocimiento generado en torno a la energía solar termoeléctrica es un claro ejemplo de ello, pues al tratarse de una tecnología que está cerca de poder competir en precios con las fuentes tradicionales y estar muy abierta a la incorporación de avances y nuevos descubrimientos, es muy susceptible de poder ser un sector exportable, con lo que se puede convertir en un área económica que genere beneficios netos al país.

El caso de la empresa Abengoa es un claro ejemplo de ello, pues está posicionada como una de las más importantes del mundo en el sector y prueba de ello es el dinamismo de su filial americana que va a construir en Arizona la mayor central termosolar del mundo.

Obsérvese que la actividad del sector queda manifiesta en que con relativa frecuencia hablamos de la “central más grande del mundo”, pues se construyen cada vez de mayor potencia y aumentando cada día.

Las cifras

En ese sentido cabe destacar que el presidente de EEUU anunció hace no mucho que se concederá una garantía federal de 1.450 millones de dólares a la empresa española para que construya la mayor termosolar del mundo en el estado de Arizona, que es como se sabe, una zona privilegiada para el aprovechamiento solar.

La planta poseerá una potencia de 250 MW y su electricidad podría ser suficiente para cubrir las necesidades de una gran ciudad de unos 75.000 habitantes, lo cual da una idea de la magnitud del proyecto y del potencial de la energía solar, en un país que como sabemos, no es muy dado a invertir a cambio de nada e incluso a cambio de “sólo” beneficios medioambientales.

Para que cuajase el proyecto, Abengoa llegó hace año y medio a un acuerdo con Arizona Public Service, que es la empresa eléctrica más importante de aquel estado y que se hará cargo de la distribución de la electricidad generada.

La planta creará casi 2.000 puestos de trabajo durante su construcción, hasta 2013, y casi 100 de forma estable y directa, a lo largo de su vida operativa, que será de varias décadas.

Esta central ya contará con acumulación de energía térmica para que no pare durante toda la noche, lo que permitirá que al menos, funcione seis horas sin sol. Para ello dispondrá de un sistema de acumulación por sales fundidas.

Acumulación mediante sales fundidas

Este sistema se basa en que cualquier sustancia al cambiar de estado –por ejemplo de sólido a líquido, al fundirse- absorbe una gran cantidad de calor sin aumentar su temperatura, que queda almacenado en su interior y puede ser devuelto al entorno si se enfría y pasa de nuevo a su estado sólido.

La empresa en EEUU

El mercado estadounidense se ha convertido en un objetivo prioritario para la empresa española Abengoa. Tanto es así, que la compañía con sede en Sevilla prevé que, en tres años, el 30% de su facturación provenga de aquel país.

Si bien a día de hoy España sigue siendo su principal mercado, los proyectos internacionales cada vez ganan mayor relevancia. A principios de junio, el consorcio formado por Abengoa y la compañía francesa Total se adjudicaron la construcción de una planta termosolar de 100 megavatios en Abu Dabi. Por otra parte, en Argelia, Abengoa está construyendo la primera planta del mundo de tecnología híbrida, que implica la utilización de energía solar y gas.

Y a finales del año pasado, Abengoa Solar firmó un contrato de compraventa de energía en California para vender la electricidad generada por un planta termosolar de 250 megavatios ubicada en el desierto de Mojave, a unos 150 kilómetros al noreste de Los Ángeles.

Obama impulsa al sector

Esta expansión de la empresa en EEUU se está viendo favorecida por el impulso que el gobierno de ese país está dando a este tipo de energía y a la eólica, como elementos centrales en la incorporación de renovables a su mix energético.

El caso extremeño

Por último, he de destacar el apoyo que está teniendo esta tecnología en Extremadura, región que dispone de grandes espacios y de unas condiciones de insolación inmejorables. Sólo falta encontrar la fórmula que permita que la riqueza que se genere revierta directamente en los ciudadanos y en las empresas de dicha región.

Saludos.
La energía más limpia es la que no se consume.

No hay comentarios: